

Beneficios de la Vitamina C
La vitamina C es una vitamina esencial para el organismo humano ya que este no la produce. Químicamente corresponde al ácido ascórbico el cual es hidrosoluble por lo que el exceso es eliminado en la orina.
Como no se almacena en el cuerpo, se necesita el consumo permanente de esta vitamina que es esencial para el crecimiento, desarrollo y mantenimiento de todos los órganos.
La necesidad diaria de Vitamina C recomendada en la dieta, oscila entre 50 y 100 mg. La cantidad depende de la edad, del sexo y de otros factores como el embarazo y las enfermedades, así como también en los fumadores y cuando se abusa del alcohol. En general los niveles mayores corresponden a los hombres adultos.
La mejor forma de obtener los requerimientos diarios de vitamina C es consumiendo una dieta balanceada donde estén las frutas y las verduras. Un vaso de jugo de naranja aporta aproximadamente 125 mg de VITAMINA C.
Las frutas que tienen aporte de vitamina C son: La naranja, la mandarina, el limón, el kiwi, las fresas, la papaya y el mango. Entre los vegetales las mayores fuentes de vitamina C son: los pimientos, el brócoli y la coliflor.
Funciones
La vitamina C es esencial para la producción de colágeno, siendo indispensable en producción y reparación de diversos tejidos, en la cicatrización, en especial la piel, los tendones, los ligamentos, los vasos sanguíneos, los cartílagos, los huesos y los dientes. La deficiencia de Vitamina C se caracteriza entonces por sangrado fácil de la encías, dificultad en al cicatrización de las heridas, piel áspera y seca, cabello seco y quebradizo, anemia y debilidad. El cuadro severo se denomina escorbuto.
La vitamina C es además un potente antioxidante, actúa bloqueando los radicales libres y de esta forma previene el envejecimiento prematuro, el cáncer y las intoxicaciones.
Durante muchos años, la vitamina C ha sido un remedio popular para el resfriado común aliviando los síntomas.
Nombres alternativos:
Ácido ascórbico o Ácido deshidroascórbico